El presidente venezolano, Hugo Chávez, reiteró este sábado la advertencia de que el Gobierno de Estados Unidos (EE.UU.) pretende seguir invadiendo otros países con la intención de apoderarse de sus riquezas naturales. El líder hizo especial énfasis en el conflicto interno de Libia y aseguró que pese a las intensas revueltas populares, ningún agente extranjero tiene derecho a entrometerse en el país árabe.
En una cadena nacional emitida desde Caracas (capital del país), el gobernante venezolano afirmó que la solución que debe buscarse para la guerra civil que se está gestando entre los partidarios y opositores al líder libio Muammar Al Gaddafi, “tiene que ser pacífica y democrática”.
En este sentido, explicó que la posición del Gobierno estadounidense “representa una amenaza” para la soberanía de Libia, ya que su intención, más que buscar la paz, es apoderarse de las riquezas naturales del país “y sobre todo del petróleo”.
“El hecho de que en Libia haya una guerra civil no le da a ningún país el derecho de invadir a Libia (...) pero esa amenaza sigue vigente porque el imperio yanqui lo que busca es recursos naturales y petróleo”, aseveró.
Con estos argumentos, enfatizó en que lo más conveniente es seguir impulsando la manera de que en el país se acabe la violencia, y recordó el Comité de Paz Internacional propuesto por la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) que busca un fin conciliatorio al conflicto.
“Hay que buscar la paz pero respetando la autonomía de Libia (...) Así como ayer fue Irak, Afganistán, Panamá, Cuba, México (...) Hoy quieren hacer lo mismo con ese pueblo (libio)”, advirtió.
También exigió a la Unión Europea (UE) que desista de alentar una invasión a Libia y criticó el “doble rasero” de esta organización multiestatal, que “hasta hace poco estaban buscando negocios en Libia”.
Los comentarios fueron emitidos durante una asamblea popular con los Consejos Comunales de la carretera vieja Caracas-La Guaira (al norte del país) para conocer las condiciones de habitabilidad de esta zona.
Chávez recorrió la localidad para intercambiar opiniones con los líderes comunales y ratificó el compromiso de entregar viviendas a todos los damnificados que tuvieron que refugiarse en albergues tras las intensas lluvias del diciembre pasado.
En este contexto, el jefe de Estado afirmó que para este 2011 se tiene pensado la construcción de 150 mil viviendas en el país, que además de ser distribuidas a las más de 28 mil familias damnificadas, también servirán de albergue a las personas que viven sobre cerros granulosos que corren el riesgo de desplomarse en la capital venezolana.